La isla de las Especias

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lunes, 31 de octubre de 2011

LOS JUGADORES DE POKER















" Un forastero entra en una partida y liga una escalera de color. Apuesta y pone todo su dinero en la mesa. Su adversario enseña un dos, un cuatro ,un siete, un nueve y una jota de distintos palos y empieza a arramblar con el dinero. Nuestro amigo , incrédulo, señala su escalera de color y protesta. El otro señala un letrero en la pared que dice " 2-4-7-9-jota hacen un Gato Viejo. El Gato Viejo gana todo.

Pues bien, nuestro hombre sale del local, repone sus efectivos y más tarde, esa misma noche, se encuentra sosteniendo en la mano el mismísimo Gato Viejo ; cosas de la suerte. Una vez más , apuesta todo lo que tiene. Los dos juegan hasta el último centavo. Se enseñan las cartas. Nuestro hombre despliega su Gato Viejo . Su adversario enseña una pareja de doses y empieza a trincar la pasta. " Ejem", dice nuestro hombre " Usted no tiene más que pareja de doses y yo tengo un Gato Viejo" A lo cual responde su adversario señalando otro letrero en la pared que dice " El Gato Viejo sólo vale una vez por noche" .



DAVID MAMET, Joyas de la biblioteca de un jugador
( La ciudad de las patrañas)



Ganar una buena mano, una suculenta y disputada mano en una partida de póquer , es una de las sensaciones más intensas, excitantes y embriagadoras que uno puede experimentar para distraerse de esta pesada broma que es la vida.

La tensión y la descarga de adrenalina se incrementarán progresivamente cuanto más numerosos sean los envites, y por tanto las subidas de apuestas, en el momento final de la mano, entre los jugadores supervivientes de la misma. Es entonces cuando el póquer adquiere su mejor carta- nunca mejor dicho - de naturaleza y se convierte en un juego oral, de palabras y silencios, y sobre todo psicológico ,de conocimiento o al menos de intuición del coraje o pusilanimidad del contrario, del grado de confianza en si mismo y de cómo amedrentarlo como una pulsión tan esencial y sencilla como efectiva, con impetuosos incrementos de dinero en liza . Lo que podría traducirse en lenguaje castizo por : " Así que ves mis doscientos y subes cien. Pues yo veo tus cien y meto... ¿ Cuánto tienes de resto? ¿ trescientos cincuenta? Pues trescientos cincuenta euros. Si quieres verme las cartas, ya sabes lo que tienes que hacer..."
.....

A lo largo de mi vida, salvo en contadas excepciones, las partidas en que me he metido han sido baratas, y en la actualidad no juego más que con los mismos amigos de siempre y arriesgando cantidades modestas que nos mantienen entretenidos desde el crepúsculo hasta el amanecer...."

Mientras llega, sigo leyendo.Un beso a todos




Partes del relato titulado " El Rolls Royce de los juegos de cartas" escrito por JuanBas. Lo he encontrado en la revista nº 1 de " Eñe. Revista para leer". la imagen se titula " Perros jugando al póker" y es de CASSIUS MARCELLUS COOLIDGE

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